El jueves pasado, me llamó una amiga a quien no veía hace un tiempo, y a quien para los propósitos de este blog llamaré "Iya". Iya me hizo una propuesta irresistible: "No querés ir a probar ese nuevo lugar 'No me olvides'?"
Ya había aceptado su propuesta apenas terminó de decir "...ese nuevo lugar...", pero la verdad es que desde que escuché se abrió este restaurant, quería ir a probarlo.
Llegué un poco temprano, entonces aproveché para mirar, mirar y mirar. "No me olvides" te entra por los ojos... ¡Los dueños y arquitectos del lugar le pusieron atención hasta en el último detalle!
Nuestra mesa estaba afuera, que,
dicho sea de paso, si hacen una reserva, PIDAN UNA MESA AFUERA. El patio del restaurant está ambientado como si fuera un barrio o vecindad de un pueblito cualquiera. La pared del fondo tiene miles de ventanas, puertitas y balcones, de "casitas" antiguas que dan al patio. Los platos e individuales son onda "miss-matched", ninguno del mismo juego. En el medio del patio hay una barra espectacular en donde el bartender se encuentra permanentemente ocupado haciendo tragos espectaculares.
Tentada, pedí una caipirinha. ¡Me trajeron una mini-jarrita! Estaba deliciosa (¡y peligrosa!). Menos mal llegaron mis amigas en seguida porque o si no, iban a encontrarme bañándome en la tina antigua que ahora sirve como fuente decorativa al lado de la puerta de entrada. Mis amigas también quedaron hipnotizadas con la decoración del lugar y mi otra amiga, a quien llamaré "Em", se puso a sacar fotos compulsivamente. Es más, deben agradecer a Em por las fotos que van incluidas a esta entrada.
Como vieron que me habia liquidado mi mini-jarrita de caipirinha, mis amigas se convencieron de que debía estar rica, y ellas también pidieron caipirinhas. (Terminamos contagiando a todos los comensales, ¡el pobre bartender luego ya no daba mas con los pedidos de caipirinhas!)
Cuando llegó la hora de ordenar, la cuestión fue rápida. Creo que teníamos mucha hambre, porque la verdad el menú de "No me olvides" es suficientemente variado como para marear al comensal: hay desde pasta, risottos y pescado hasta asado y comida paraguaya. Por ejemplo: como entradas ofrecen steak tartare, carpaccio, endivias rellenas y empanaditas de camaron (los precios de las entradas van de 20.000Gs. a 40.000Gs. mas o menos). Tienen risottos de distintas variedades. El más barato es el de Funghi (40.000Gs.) y el más caro es el de Ossobuco (75.000Gs.)
Nosotros nos decidimos por un queso asado con rúcula y tomates secos como entrada y luego Iya y yo compartimos una moqueca de camarones. ¡Estaba espectacular! No solo en términos de sabor, sino de presentación. Vino dentro de una calabaza, con un risotto de queso como acompañamiento.
De postre, decidimos pedir un volcán para compartir. Como ya se habrán dado cuenta luego de mi última entrada, el volcán de chocolate es uno de mis postres preferidos, y por ende, soy muy exigente con los volcanes. Lastimosamente, este volcán fue otra "simpática tortita". Conclusión: me tendré que mudar a Hawaii si quiero disfrutar de algo de lava...
Obviando el volcán sin lava, quedé encantada con "No me olvides", y espero volver pronto. Es verdaderamente inolvidable...
Lastimosamente me olvidare de no me olvides por los utensilios , el plato tiene que ser blanco , porque las ganas de comer te entran por los ojos... Pero a lo mejor me hacen una excepción y me dan uno blanco para este paladar grueso e delicatto.
ResponderEliminarMuchas gracias Alma Glotona! Es realmente una lectura entretenida y muy bien realizada sin duda.
ResponderEliminarSi pudieras decirme donde queda "No me olvides" te agradezco ya que quiero ir, me dejaste con las ganas!!!
Claro Ricardo, es Cruz del Defensor esq. Lopez Moreira
ResponderEliminarSiguiendo tu recomendación fui a cenar a "No me olvides". El lugar es hermoso y la comida bien sabrosa.
ResponderEliminarEl pan es exquisito y lo sirven suuuper humeante.
En resumen, me encantó !
Te sigo leyendo...
Qué bueno, Vero! Esta noche estaré visitando otro lugar nuevo, o sea que se viene otra aventura glotona :)
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